De nuevo soledad
Empecé cayendo bajo la cautivadora mirada de un tierno ángel vestido de rosa. Recuerdo aquel primer instante en que su difuminado rostro miró a través de una ventana mágica hacia mi solitario corazón. Con el alma llena de delirios me atreví a soltarle un saludo, y en mi enmarañada conciencia comencé a forjar una ilusión, la ilusión de que ella sería la primera.
Rocié mi provenir con un anhelo. Algunas sonrisas y varias palabras fueron suficientes para ver la mentira que colgaba de nuevo en mi cabeza. Pero el corazón no ha de escuchar razones, y menos aun uno tan sordo como el mío. Un par de semanas para el primer encuentro, parado a delgada sombra de un árbol me di cuenta una vez más de que me equivocaba, pero al terco corazón le encanta sufrir, así que esperé a que no llegara.
Ignoré la decepción que el ánimo sintió. Después de algunos reclamos, otra fecha y un pequeño accidente, mi impaciente alma por fin la conoció, bella como la imaginó el sueño. Sus ardientes lindos ojos dispararon a la herida donde cuelga mi conciencia. Esta me dice que no, que está mal, pero como siempre, el corazón la ignora.
Karma maldito que te burlas de mí. Ella no puede caminar conmigo, su espíritu esta con alguien cercano al mió y no parece querer acercarse a mí más de lo que a mi sangre sí. Reniego y me apeno, has vuelto a caer, corazón herido, y lo que es peor, esta vez la culpa no es del destino, sino de tu inocente estupidez.
Asustado y deprimido, nuevamente corro con mi hermano por consejo, y él me dice que espere a la siguiente musa. Pero cansado estoy de esperar, cansado de fracasar mientras espero, cansado de vivir la inmortalidad para mí mismo. Sin embargo, la soledad parece ser mi mejor amante. Acostumbrarme a vivir con ella, suena difícil, pero tal vez para el alma del inmortal no haya mas opción que vivir.
Batou's Soul. Death & Rebirth 